El año nuevo es una invitación a renacer, a crecer, a evolucionar ¡Feliz 2024!

El año nuevo no es solo un cambio de calendario, sino una oportunidad de cambiar de actitud, de perspectiva, de propósito. El año nuevo es una invitación a renacer, a crecer, a evolucionar

El hecho de que reservemos un día para celebrar el cambio de año tiene un significado espiritual especial.

La espiritualidad es la forma de entender la vida que tiene cada persona, basada en su esencia inmaterial o espíritu. La espiritualidad puede estar relacionada con la religión, pero también puede ser independiente de ella. La espiritualidad implica buscar un sentido, un propósito o una conexión con algo superior a uno mismo, llámele Dios , Naturaleza o Energía Divina. 

El Año Nuevo es un momento para reflexionar sobre el año pasado y hacer planes para el futuro.

Es un momento para que las familias y los amigos se reúnan, ya sea celebrando con fiestas donde se tira la casa por la ventana o simplemente compartiendo una taza de chocolate caliente. 

El significado espiritual del Año Nuevo es que debemos recordar que todos estamos interconectados en este mundo.

No podemos fastidiar a otra persona sin salir dañados.

Tampoco podemos ayudar a otra persona sin salir beneficiados. 

Si las personas malvadas supieran lo beneficioso que es hacer el bien lo harían aunque solo fuera por egoísmo, pero el placer que encuentran en dañar es superior a cualquier fuerza y al final se destruyen en el camino.

Todo lo que hacemos a otro nos lo hacemos a nosotros mismos, la ley espiritual es clara y solo hay que ponerla a prueba. 

Si hacemos el bien a los demás, nos haremos el bien a nosotros mismos, y si hacemos el mal a los demás, nos haremos el mal a nosotros mismos.

La ley de causa y efecto tiene una dimensión ética y una dimensión espiritual. Desde el punto de vista ético, esta ley nos invita a ser responsables de nuestras acciones y a tratar a los demás como nos gustaría que nos trataran. Desde el punto de vista espiritual, esta ley nos muestra que estamos conectados con todo lo que existe y que nuestras acciones tienen consecuencias en nuestro destino y en nuestra evolución.

Para poner a prueba esta ley, se requiere de una actitud consciente y de una observación atenta de los resultados de nuestras acciones. También se requiere de una comprensión de que las causas y los efectos no siempre son inmediatos ni evidentes, sino que pueden manifestarse a lo largo del tiempo y en diferentes planos de la realidad.

Las relaciones que forjamos entre nosotros están unidas por el amor y la compasión, lo que nos ayudará a acercarnos más como seres humanos espiritualmente conectados.

Necesitamos recordatorios a lo largo de nuestras vidas de que hay mucho más en la vida que solo lo que está sucediendo (trabajo, obligaciones, compromisos)  en este momento; ¡Enfocarnos en lo mejor de nosotros mismos nos ayuda a lograr el éxito en todos los aspectos de la vida!

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¡Muchas gracias y recuerden que les quiero sanos! 

Así como nos tomamos un día para celebrar el fin de año y el comienzo del siguiente, es importante aprovechar esta oportunidad para reflexionar sobre tu decisión de alejarte de los viejos hábitos y patrones y acercarte a otros nuevos.

¿Sabía que uno de los términos que la gente usa para definir la locura es "hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes cada vez"?

Todos tenemos ciclos repetitivos en los que caemos y que pueden volverse poco saludables o improductivos.

Si no tenemos cuidado, es posible que nos encontremos atrapados en este ciclo durante años sin darnos cuenta de lo que está sucediendo o de lo mucho mejor que podrían ser las cosas si tan solo cambiáramos algo.

Cuando celebramos el Año Nuevo, es fácil reflexionar sobre lo que hemos estado haciendo mal últimamente, pero igual de importante es reflexionar sobre lo lejos que hemos llegado desde entonces (o incluso más atrás).

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La razón por la que celebramos esta festividad es para reflexionar sobre nuestras vidas y hacer cambios positivos.

Identifique sus fallas (y éxitos) en su vida espiritual, encuentre las lecciones que deben aprenderse, las acciones y comportamientos que deben modificarse y prepárese para el éxito espiritual en el Año Nuevo.

Podemos usar este tiempo para reconocer que no se trata solo de hacer resoluciones, sino de comprometernos a vivir nuestras vidas de una manera que refleje para lo que fuimos creados.

La vida es un espejo que refleja lo que somos. Si queremos cambiar lo que vemos, debemos cambiar lo que hacemos. 

Mi reflexión anterior no quiere decir que las cosas duras le pasan porque ha hecho algo incorrecto o ha dañado a alguien, nada más lejos de mi intención, a veces hay que cambiar cosas como:

- Dejarnos en último lugar. 

- No poner nuestra salud como prioridad.

- No aprender a decir NO.

- No aprender a rechazar invitaciones y compromisos que nos dañan. 

- No dejar relaciones que nos hacen sentir insignificantes.

- No poner límites.

¿Me entiende?

Elija dar el paso en este Nuevo Año.

Espero que estas reflexiones le ayuden a entender que este Año Nuevo puede ser un comienzo de renovación y revitalización espiritual. No se trata de competir con nadie ni de ser mejores que nadie, se trata de ser mejores personas, mejores padres, mejores parejas, mejores amigos (incluyendo ser nuestros mejores amigos) y mejores personas que el año anterior. 

¡Feliz 2024! Le deseo lo mejor, hoy, mañana y siempre.